Dentro de los tipos de filamento, tenemos varios bastante curiosos, entre ellos, los que cambian de color según la luz o el calor que apliquemos a éste.
El filamento fotocromático nos promete cambiar de color según la luz arrojada sobre él incida. Así tendríamos un objeto que cambia de color dependiendo de dónde lo pongamos.
El filamento termocromático nos promete un cambio de color dependiendo del calor que apliquemos a éste, es decir, que al salir de la impresión lucirá a pleno color y a medida que se enfríe... perderá el color. Estaría bien para tener un objeto que metamos al horno y veamos que está ardiendo, ¿verdad? La pena es que los filamentos PLA, que son la base de éstos no aguantarían tanto calor.
Después el filamento de madera nos permite crear objetos en madera, su composición es simple, un filamento en el que un compost de madera está aglutinado con un pegamento que se deshace y se vuelve a armar cuando imprimimos con éste. Dicen que el resultado conserva ciertas propiedades de la madera, la verdad es que es interesante.
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